Visita nuestros artículos destacados:

sábado, 23 de febrero de 2008

Trabaja todos los músculos abdominales

Descansa la espalda sobre un balón terapéutico, con los pies en el suelo. Relaja la espalda de manera que se amolde a la forma del ba­lón. Coloca las manos detrás de la cabeza y aviéntala hacia atrás (A).

Ésta es la posición inicial. Exhala mientras comienzas a levantar la cabeza, brazos y espalda alta, girando también hacia la derecha. Continúa el movimiento hasta que ya no puedas levantar el torso ni girar más sin caer del balón (B).

Ahora gira el torso hacia la izquierda lo más que puedas (C).

Para completar el círculo, inhala mien­tras regresas el movimiento hasta la posición de inicio.


Para que hagas de manera adecuada este ejercicio, imagínate que estás dibujando un círculo con el pecho. Mantén ambos codos hacia atrás para que no los veas mientras tienes la vista al frente. Realiza de 1 a 3 series con tantas repeticiones como puedas.

viernes, 22 de febrero de 2008

Las esguinces son lesiones bastante frecuentes entre los deportistas de toda edad. Sepa qué recomienda la medicina deportiva para evi­tarlas y también para evitar las distensiones musculares.

Una esguince es una dis­tensión de los ligamen­tos que rodean a una ar­ticulación. Se producen funda­mentalmente al practicar deportes violentos, pero pueden producirse al hacer un movimiento brusco en cualquier ocasión.


Las esguinces se localizan so­bre todo a nivel de rodilla, to­billo, muñeca, hombro o codo. El tratamiento consiste en inmo­vilización y antiinflamatorios.


Que es una esguince y como se trata


Tipos de esguinces

Según su importancia y el trata­miento que se les debe dar, po­demos diferenciar distintos gra­dos de esguinces. A saber:


• Las lesiones leves o de grado I, que presentan un pronóstico ex­celente y no dejan secuelas.

• Las distensiones de una in­tensidad moderada o de grado II, en las que se produce una rotura de fibras de los ligamen­tos que puede dejar como se­cuela una inestabilidad articu­lar por lesión de los pequeños nervios que trasmiten hacia el sistema nervioso central la in­formación de la posición de la articulación. En este caso el da­ño se debe compensar con el fortalecimiento de la muscula­tura, necesitando el paciente, un promedio de tres a seis semanas para su recuperación.


• Las distensiones ligamento­sas graves o de grado III. En es­te último grupo de lesiones, al romperse el ligamento, se ori­gina una inestabilidad articular más severa por lo que el pa­ciente suele precisar un reposo prolongado para recuperarse por completo.


Factores que predisponen a padecer una lesión

Ciertas circunstancias incre­mentan las probabilidades de padecer una lesión cuando ha­cemos deporte, por eso es im­portante tenerlas en cuenta. Es­tas circunstancias son:


- Fuerza desequilibrada de las piernas desequilibrada.

- Debilidad en algún grupo de músculos

- Errores de entrenamiento.

- Mal alineamiento anatómico.

- Mala condición física.

- Calzado inadecuado.

- Situaciones de fatiga.